Un rió de plata se extendió desde Grecia por todos los países, conocidos en aquella época por una variedad de monedas y de valores sin igual y por una increíble galería de representaciones. Un rió que en poco tiempo reunió en la acrópolis de Atenas, en el Partenón consagrado a Palas Atenea, un tesoro de todo el mundo (< tesoro de Délos>), mientras el templo de Apolo en Delfos se convertía en el primer banco internacional.
Surgieron los primeros banqueros, como Arquestrato y Antistenes, y tuvieron lugar los primeros préstamos
Hacia el 525 AC., Atenas acuño una moneda de cuatro dracmas, el tetradracma.
Para darle mayor importancia, la lechuza paso a ocupar el reverso de la moneda, dejando el anverso para la cabeza de la protectora de Atenas, Palas Atenea, Durante casi dos siglos y medio estas monedas no experimentaron modificaciones, salvo la añadidura, tras la victoria de Maratón (490 AC.) de un yelmo en la cabeza de Atenea coronadas de olivo y en el reverso una luna menguante y un tallo de olivo. Mientras Maratón se representa con una luna en su tercera o cuarta fase, Salamina (480 AC., la otra gran victoria ateniense) se representa con una luna llena.
Un buen día Atenas descubre que es rica. En el cercano monte de Laurion, que convirtieron en un colador, se encontraron vastos filones de plata, esto ocurría en el 483 AC.
Tetradracma acuñado en Atenas entre los años 449 al 413 AC.
E l reverso de este tetradracma inspiro a Aristofanes a escribir en su obra LAS AVES (414 AC.) “como lechuzas de Laurion que quieren construir nidos en bolsas y empollar pequeñas piezas de plata”.
Con la introducción de la plata para las monedas, después de la mitad del siglo VI AC. , nos encontramos que las monedas de la zona de Macedonia fueron usadas con un desconcertante orden de denominaciones, variando desde el doble octodrama de 68 gramos de peso, la más pesada de todas las monedas griegas de plata, hasta el óbolo de 0’5 gramos. En una de sus monedas aparece la palabra “JETA”, quizás el primer uso de la palabra" rey" en la moneda. La helenización de la zona ya comenzada por los contactos con los griegos del siglo VI, fue llevada más allá por la expansión del reino de Alejandro I (primer monarca macedonio) y su dominio en tribus locales.
tetradracma acuñado en Amphipolis entre los años 158 al 149 AC.
Filipo II hace de Macedonia un imperio unico, acabando con la mayoría de las monedas autónomas de la región.
tetradracma acuñado en Paeonia entre el 340 al 315 AC.
Entre el 520 al 221 AC. , no cesaron de aparecer, en Sicilia y en la Magna Grecia, pobladas y civilizadas por los griegos, nuevas cecas y monedas, con una riqueza, una elegancia desconocida en la madre patria.
La monetización más importante es la de Siracusa. En el 480, después de la batalla de Himera, Siracusa acuña una serie de tetradracmas con la plata ofrecida por los vencidos cartagineses, estas monedas ocupan unos délos puestos mas altos del arte monetal griego.
tetradracma acuñado en Siracusa entre los años 485 al 478 AC.
En la mitad del siglo V AC. , entre el 440-430, comienzan a aparecer en las monedas de Siracusa los nombres de los incisores: Eumenes, Frigilios, Evarquidas, Kimon, Evainetos. En el mismo periodo aparecen nombres de los incisores en la moneda de otras ciudades siciliotas: Exakestidas en Camarina, Koiron y Heracleidas en Catania.
El estilo de las representaciones en las monedas de Sicilia, no se cristalizo en el tiempo, como ocurrio con las monedas de Atenas, sino que evoluciono de forma continua hasta alcanzar en el siglo V AC. las más altas cotas del arte numismático. Tal es el caso, por ejemplo de las decadracmas firmadas por Evainetos y Kimon y acuñadas en recuerdo de la victoria sobre los atenienses en el 413. Siete mil de ellos murieron en las canteras de Latomías o fueron vendidos como esclavos, tras ser marcados en la frente, como monedas, con el caballo de Siracusa.
tetradracma acuñado en Messana entre los años 450 al 425 AC.
En el último decenio del siglo V AC., los cartagineses en lucha contra Siracusa, acuñan posiblemente valiéndose de incisores griegos, sus primeras emisiones, llamadas corrientemente “siculo-punicas”.
En la Magna Grecia, nombre convencional que se da al mundo griego de la Península Itálica, figura una avalancha de ciudades de muy distintos orígenes. Estas ciudades fueron ocupando los tramos de costa que quedaban libres, formando un frente costero netamente helénico.
Tarento, con sus caballeros y Taras cabalgando sobre un delfin (10 series de plata distintas en el arco de tres siglos), Crotona con su trípode delfico, Caulonia con Apolo y ciervo, Nola y Neapolis estampan el buey de rostro humano en sus piezas etc.…, cada ciudad nos ha dejado verdaderas obras maestras en la que la simetría y armonía se funden en un juego de claroscuros
didracma acuñado en Tarento entre los años 302 al 281 AC.
didracma acuñado en Neapolis entre los años 450 al 345 AC.
No hay ruptura desde finales del siglo V AC., en las emisiones italiotas, y la mayor parte de sus emisiones tendrán un curso ininterrumpido hasta la época helenística.
Los principales centros comerciales fenicios como Tiro, Sidon, Biblos, acostumbrados a establecer sus transacciones en lingotes de metales preciosos, no se incorporan a la acuñación de monedas hasta época tardía, finales del siglo V AC.
dishekel acuñado en Tiro entre los años 400 al 360 AC.
Atenas era considerada la potencia mas rica del mundo helénico, disponiendo de un tesoro de 9000 talentos (moneda de cuenta que equivalía a 6000 dracmas), todo esto cambia en el año 336 AC., Alejandro de la dinastía de los Argeadas, considerada bárbara y extranjera por los griegos, toma el poder en Macedonia
¿Qué Atenas tiene 9000 talentos?, Alejandro logra reunir 18000, que trasformara en monedas y serán acuñadas en las 29 cecas del imperio.
Con el propósito de simplificar y unificar los diversos sistemas pondérales griegos, Alejandro adopto el pie ático para todas sus monedas. La moneda de Alejandro (y en esto hallamos una gran novedad y una profunda renovación respecto a la tradición griega) es uniforme aun en su multiplicidad, unificada en los tipos y en los pesos, basada en el uso del oro y la plata.
tetradracma de Alejandro acuñado entre el 336 al 323 AC.
Tras la muerte de Alejandro, en un primer momento, sobre todo por razones económicas, las monedas helenísticas continúan los tipos de Alejandro. Muy pronto, el deseo y la necesidad de afirmar la propia individualidad inducen a los nuevos soberanos a acuñar monedas con su imagen.
Egipto a partir del 305 AC., cuando Tolomeo se proclama rey, inicia la acuñación con una gran innovación, su retrato, sentado así la tradición de representar en las monedas al soberano aun vivo, y no solo después de sus muerte.
tetradracma acuñado en Ptolemais por Tolomeo II entre los años 285 al 246 AC.
El símbolo de la dinastía de los Lagidas era un aguila, en dimensiones reducidas en las primeras acuñaciones de Tolomeo I y ocupando toda la superficie en las acuñaciones del resto de monarcas lagidas.
Tetradracma acuñado en Alejandría por Tolomeo XII en el año 53 AC.
El reino Seleucida era el más extenso de los reinos de la herencia de Alejandro. Llegaba desde el Egeo, hasta el Indo y el Asia Central. El fundador de la monarquía había sido Seleuco I en el 305 AC. Es a partir de la época del hijo y sucesor de Seleuco, Antioco I cuando aparece un definitivo sistema monetario usando el retrato regular del rey y el del dios dinástico Apolo en el reverso. De todas las maneras son los retratos los que han de llamar nuestra atención, con su profundo sentido realista.
tetradracma acuñado por Antioco VIII entre los años 121 al 96 AC.
tetradracma acuñado en Tiro por Antioco VII entre los años 138 al 129 AC.
El antiguo reino seleucida se disgrega y las ciudades de la costa fenicia, Tiro, Sidon, Arados, llegan a ser independientes.
tetradracma acuñado en Arados en el siglo II-I AC.
De Siria la moneda pasa a Bactria y de aquí a la India, difundiéndose por los reinos indo-griegos. En la primera mitad del siglo II AC., la moneda se difunde también entre los partos, siempre según el modelo de los tipos acuñados por los Seleucidas.
tetradracma acuñado en Taxila por Azes II entre los años 35 al 5 AC.
En la época de la tercera guerra macedonica, ocurrida entre el 171 al 168 AC., los monedajes de Grecia y Anatolia sufrieron un cambio muy profundo. Desaparecieron todos los anteriores, no solamente las piezas reales de Macedonia o Pergamo, sino también las piezas póstumas de Alejandro y Lisímaco, acuñadas con la efigie de Alejandro. Fueron suplantadas, por nuevos símbolos monetarios, de los cuales, un grupo, emitido por una veintena de ciudades, se distinguen por una topología única: en el anverso cabeza de una divinidad, en el reverso, un motivo, rodeado de una corona. Son los tipos tradicionales de Atenas.
Tetradracma acuñado en Atenas durante el siglo II AC.
Es posible que la explicación de este fenómeno sea la decisión de eliminar, después del desastre de Macedonia en el 168 todo recuerdo de la grandeza macedonica.
Algunos años antes, se había producido algo semejante, en el reino de Pergamo, el numerario de Pergamo con los tipos reales o póstumos, fue desmonetizado y reemplazado por nuevas piezas llamadas Cistoforos.
Los cistoforos fueron emitidos con el afán de crear una moneda a la que se le diera una significación universal, con un simbolismo que fuera aséptico para todo el ámbito donde iban a ser aceptadas, en áreas tan conocidas como la del Egeo y el Próximo Oriente.
tetradracma cistoforo acuñado en Pergamo entre los años 163 al 67 AC.
El endémico estado de guerra existente entre los reinos helenísticos por el control de las diversas regiones, tuvo el único efecto de desgastarlos hasta llevarlos a la conquista y sumisión por Roma. Macedonia en el 168 AC., Egipto en el 30 AC. y Siria en el 64 DC...
Por otra parte, los romanos prefirieron por lo general, adoptar las instituciones locales, políticas o monetarias, a sus necesidades, antes de imponer otras nuevas. Es por esto por lo que no dejaron ninguna marca en el monedaje del oriente mediterráneo, execpto un breve periodo del siglo II AC... Las nuevas piezas tuvieron curso hasta el siglo I.
Tetradracma acuñado en Tasos en el año 148 AC.